Dependiendo
de la situación, el plan establece distintos niveles de activación y determina
qué nivel corresponde a cada situación declarada.
·
Nivel 1 de activación. prealerta y alerta: Nivel que corresponde a una situación 0. La atención se lleva a
cabo mediante los procedimientos habituales.
En este nivel se distinguen dos
fases: prealerta y alerta.
·
Prealerta: Se realiza la prevención y seguimiento del riesgo.
·
Alerta: Se detecta un incremento o una presencia del riesgo y se activa
el plan en fase alerta. Dependiendo del riesgo, en esta fase se mantiene la
vigilancia y se advierte a todos los equipos para que estén preparados porque
es posible una activación en cualquier otro momento, o se inician acciones para
reducir o anular el riesgo.
·
Nivel 2 de activación. Alarma: En esta se produce la emergencia, hace que se declare la alarma.
Corresponde a las situaciones 1 y 2, en las que los medios propios de la zona
no son suficientes y es necesario la activación de medios ajenos.
Algunos planes recogen dos
categorías dentro del nivel II:
·
Nivel 2 local: Corresponde a una situación 1 y se puede controlar con medios de
la propia comunidad autónoma.
·
Nivel 2: Corresponde a una situación 2 y requiere la colaboración de
otras comunidades autónomas.
La declaración de nivel II no
implica que todos los medios y recursos previstos en el catálogo se activen.
Las activaciones las va solicitando el centro de mando en función de las
necesidades.
La medidas aplicadas en este
nivel son las de protección e intervención.
·
Nivel 3 de activación. Alarma: Se mantiene la alerta y el estado de emergencia, pero debido a
la gravedad, extensión o naturaleza del suceso se establece su condición de
emergencia de interés nacional, por tanto es el nivel de activación que corresponde
a la declaración de una situación 3.
En este caso habrá varios
centros de mando, uno en cada comunidad afectada, que quedarán bajo la
coordinación de la autoridad prevista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario